Nos surgió la idea de las pulseras a raíz de un secuestro a un niño pequeño ocurrido en nuestro barrio. Por suerte, el chaval apareció sano y salvo. Pero, se sembró el miedo entre los padres y madres de la zona. En ese momento fue cuándo empezamos a pensar a ver qué podríamos hacer nosotros para proteger a la gente de nuestro pueblo. Se nos ocurrió la idea de Security Jewel, unas pulseras localizadoras capaces de rastrear a cualquier ser humano en cualquier lugar del mundo.
En un principio nacieron para niños y personas mayores dependientes. Notamos que el público estaba receptivo a nuestros dispositivos así que, ampliamos nuestro catálogo.
Actualmente nos va bien, gustamos y el público está muy contento con nuestro servicio.
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